Los consejos del perro viajante – El sentimiento detrás de una postal

Los consejos del perro viajante – El sentimiento detrás de una postal
23/02/2011 10 comentarios Personal, Viajes Natalie Michelle Jurado Solanilla

Consejos del perro viajanteSé que hoy en día la idea de utilizar el correo convencional para comunicarse con amigos y familiares puede considerarse obsoleto e incluso incómodo. Teniendo la posibilidad de enviar correos electrónicos o postales virtuales preciosas y gratuitas con un solo clic, ¿quién se va a tomar la molestia de escribir cartas a mano, comprar sellos y llevarlas a una oficina de correos?

Aunque comparto y utilizo los métodos de comunicación modernos, a mí personalmente no me gusta desestimar la sensación de llegar a casa, abrir el buzón y encontrar la imagen de un sitio desconocido y unas cuantas palabras de alguien que desde hace tiempo no veo.  Esto siempre logra arrancarme una sonrisa. ¡Es reconfortante!

Partiendo de esa premisa, me pregunto: ¿A quién no le gusta saber que la gente le recuerda con cariño? ¿A quién no le gusta recibir noticias de un amigo o familiar que está lejos?

Postales de Japón, Marruecos y Corea del Sur
Postales que me enviaron desde Japón, Marruecos y Corea del Sur

Postales de Japón, EE.UU., Alemania y Argentina
Postales que me enviaron desde Japón, EE.UU., Alemania y Argentina

Las postales son una forma bonita de decirle a un ser querido que le recuerdas aunque los separe una distancia enorme, además de ser una forma sencilla de contarles en qué parte del mundo te encuentras y qué estás haciendo.

Como llevo unos cuantos años viajando y enviando postales, he aprendido algunos trucos que facilitan este proceso y que ahora comparto en este blog:

  1. He confeccionado una lista con las direcciones de mis familiares y amigos, la cual llevo siempre conmigo.  ¡La inspiración para enviar una postal puede llegar en cualquier momento!
  2. Suelo comprar muchas postales en las tiendas de souvenirs, aunque no haya decidido aún a quiénes irán dirigidas. En caso de que sobren siempre pueden pasar a engrosar mi coleccion personal. 😉
  3. Si en mi recorrido encuentro una oficina de correos, entro a comprar algunos sellos o estampillas; así evito tener que buscarlos a última hora.
  4. Si no encuentro ningún sitio donde depositarlas, pregunto en mi hotel si prestan el servicio de envío de correspondencia.  Suele ser el caso, aunque las postales tienen que estar previamente franqueadas, claro está.  Algunos hoteles incluso tienen sellos a la venta para facilitar las cosas a sus clientes.
  5. En muchos aeropuertos hay oficinas de correos o en su defecto buzones de recogida, así es que si eres de los que dejan todo para el último momento, ¡no hay problema!

Espero que consideren útil este consejo del perro viajante. ¡Un saludo! 😉

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  1. 1

    Alvaro Osorio

    Natie, niña linda, yo he querido tener ese hábito, pero bueno, empecé con uds justamente a ver si salia todo bien para empezar a enviar a los demás. Besitos y éxitos con tu blog

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    1. 1

      Natalie Jurado

      ¡Gracias Advadinho!
      Yo intento enviar postales en todos los viajes, sobre todo a mis papás, es una forma de compartir la experiencia con ellos ;.)

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  2. 1

    Pirin

    Recuerdas cuando tuvimos que comprar sellos del vaticano a 70 centavos de euro pero la máquina solo aceptaba moneda de euro? 30 centavos destinados a la caridad de vaya uno a saber quien.

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    1. 1

      Alejandro

      Tu generosidad será recompensada…. j0j0j0

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    2. 1

      Carlos Ho D.

      Jajajaja, lo mejor de esa anécdota es cómo Pirín se volvió loco y empezó a mandar a la p*ta madre a medio mundo porque le estaban robando 30 céntimos de euro.

      Si no me equivoco, lo peor es que cuando miró las monedas que tenía encima, no tenía ninguna de un euro, sólo de dos euros. Jajajajajaja.

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  3. 1

    Lussy

    Debo confesar que este capitulo me ha llegado al corazón, y cuanta razón tienes en decir que te roban una sonrisa!!!!

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    1. 1

      Natalie Jurado

      Es así…a mí me encanta recibirlas!!!
      Me alegro mucho de que te haya gustado.

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  4. 1

    Marilyn Dieguez

    Recuperaré el hábito de enviar postales de los pueblitos donde vaya en nuestro país, así las tenga que confeccionar (aprenderé a hacerlo)… jejeje. Recuerdo que cuando estaba en Rumanía escribía y escribía muchísimas cartas y postales a familiares y amigos para asegurarme que tendría algo cada día cuando llegaba el cartero… igual, cuando vivimos en Madrid. Me hacía muy feliz recibir cartas y expresiones de cariño; las necesitaba como el aire que respiraba… Gracias, por las postales que me envían… Los amo!!!

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    1. 1

      Natalie Jurado

      Gracias por sus palabras!!! Siempre que nos sea posible seguiremos enviando postales y narrando nuevas experiencias.

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  5. 1

    Yokoso Japan! – Despedida y buenos recuerdos – El perro viajante

    […] comprar un pin de cada sitio visitado. Y es que, además de sumar postales, como mencioné en una entrada anterior, me encanta coleccionar pines e imanes de diferentes lugares, creo que es una forma económica de […]

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